lunes, 28 de marzo de 2011

Juegos Conferencia General


Los días 2 y 3 de abril de 2011 se llevará a cabo la Conferencia General Nº 181 de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el Centro de Conferencias de Salt Lake City. La misma se transmitirá Vía Satélite en los centros de estaca y por Internet.

Como en todas las conferencias, les comparto la hojita de actividades para la conferencia.  Se imprime en una hoja A4 y se dobla en 4 para que quede como un librito. Acá también van a poder ver las hojas de actividades del año pasado.


Acá les dejo algunas ideas que hay dando vuelta por la web que son muy buenas!




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miércoles, 23 de marzo de 2011

La Nota Musical


Este juego es para cantar una y otra vez! El desarrollo del juego es similar a "Frío - Caliente".

Haga que un niño salga de la habitación mientras esconden la nota musical en el aula. Luego invite al niño a entrar y comenzar a buscarla. Los otros niños dan pistas al cantar una canción más fuerte cuando el niño se acerca a la nota ("caliente") o más suave si el niño se aleja ("frío") del lugar. Sigan cantando la canción hasta que encuentre la nota y vuelvan a jugar otra vez con otro niño. Puede repetir la misma canción o utilizar otra canción que necesite repaso.

Pueden utilizar una lámina que corresponda con el tema de la canción, o algún otro objeto.

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lunes, 21 de marzo de 2011

Tiempo para Compartir: Hoy en día nos guía un profeta viviente

Tendamos una mano a los demás
Por el presidente Thomas S. Monson

El presidente Monson enseña que podemos ser felices cuando tendemos una mano a los demás.


Para encontrar la verdadera felicidad, debemos dejar de enfocarnos en nosotros mismos. Muchas personas se han unido a la Iglesia —o al menos han llegado a conocer la Iglesia y a respetarla — porque alguien hizo el esfuerzo de tenderles la mano. Compartiré con ustedes una preciada experiencia familiar que tuvo sus comienzos allá por el año 1959, cuando fui llamado a presidir la Misión Canadiense, en Toronto.

Nuestra hija, Ann, cumplió cinco años poco después de que llegamos a Canadá. Veía a los misioneros hacer su trabajo y ella también quería ser una misionera. Para demostrar comprensión, mi esposa le dio permiso a Ann de llevar a la escuela algunos ejemplares de la revista Children’s Friend [que actualmente se llama Amigos]. Pero eso no era suficiente para Ann; ella también quería llevar consigo un ejemplar del Libro de Mormón para poder hablar con su maestra, la señorita Pepper, acerca de la Iglesia.

Hace sólo unos años, pero largos años después de nuestro regreso de Toronto, llegamos a casa después de unas vacaciones y encontramos en el buzón una nota de la señorita Pepper, que decía lo siguiente:

Querida Ann:

Piensa en muchos años atrás; yo era tu maestra de escuela en Toronto, Canadá. Los ejemplares de la revista Children’s Friend que llevaste a la escuela me llamaron mucho la atención. Me impresionó la dedicación que tenías hacia un libro llamado el Libro de Mormón.

Prometí que un día iría a Salt Lake City para ver por qué hablabas de la manera que lo hacías y por qué creías tal como lo hacías. Hoy tuve el privilegio de ir a tu centro de visitantes de la Manzana del Templo. Gracias a una niña de cinco años que comprendía bien aquello en lo que creía, ahora tengo un mejor conocimiento de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

La señorita Pepper falleció poco después de su visita a Salt Lake City. Qué feliz estaba Ann cuando asistió al Templo de Jordan River, en Utah, y llevó a cabo la obra del templo por su amada maestra, a quien hacía tantos años le había tendido la mano.


Actividad: Plantemos las semillas del Evangelio

El tender una mano a los demás es una de las maneras en que puedes compartir el Evangelio todos los días. Cada vez que dices la verdad, que eres servicial y amable con tus amigos, o que vives las normas del Evangelio, estás compartiendo el Evangelio. Cuando haces estas cosas, estás plantando pequeñas semillas del Evangelio en el corazón de las personas. Es probable que un día algunas de esas semillas crezcan y se conviertan en hermosos y firmes testimonios del Evangelio.

Mira las ilustraciones que aparecen a continuación. En cada semilla, escribe una palabra que describa una forma en la que el niño esté compartiendo el Evangelio; una ya se hizo como ejemplo. Después, colorea las hermosas flores que crecen de cada semilla.


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viernes, 18 de marzo de 2011

Canta esa frase!



Este es un juego para repasar canciones de una sola estrofa, incluyendo el estribillo.

Primero cante la canción completa con los niños y luego invite a uno de los niños a lanzar el dado. El número que sale será el número de la oración o frase de la canción que deberán cantar. Pídale al pianista que toque la melodía de esa frase (la pianista tendrá que tener numeradas las frases) para que los niños adivinar las palabras que coinciden con esa melodía. Si las palabras son correctas, canten la frase y vuelvan a tirar el dado.

Este juego puede funcionar también por equipos, o de a un niño a la vez, dependiendo del tamaño de su primaria.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Escuchen la voz del profeta

Virginia U. Jensen
Primera Consejera de la Presidencia General de la Sociedad de Socorro
"Si escuchamos la voz del Señor por medio de Su profeta viviente y seguimos su consejo, nunca nos descarriaremos".
Virginia U. Jensen
Una noche, cuando tenía once años, escuché un alboroto afuera de mi ventana. Me asomé y vi que en la calle había niños voceros que llevaban bultos de periódicos en donde se anunciaba el fallecimiento del presidente George Albert Smith, octavo presidente de la Iglesia. El presidente Smith había sido el único profeta que yo había conocido en mi breve tiempo en la tierra. Fue durante la administración de él que sentí los primeros brotes de un testimonio, y aún en ese entonces, sabía cuán importantes son los profetas de Dios. De las enseñanzas que recibí en la Primaria, así como de las que recibí de padres amorosos en nuestro hogar, sabía que el presidente Smith era nuestro vínculo terrenal con nuestro Padre Celestial y con Su Hijo Jesucristo, y que ellos podían hablar conmigo por medio de él. ¡Qué gran concepto para una pequeña! El Espíritu le había confirmado a mi mente de once años que eso era verdad. Cuando me enteré de su muerte, sentí una gran pérdida. 

Sin embargo, cinco días después del fallecimiento del presidente Smith, el presidente David O. McKay se dirigió a la congregación en este tabernáculo. Los santos acababan de sostenerle como profeta, vidente y revelador. Mientras se secaba las lágrimas, él dijo: "Nadie puede presidir la Iglesia sin antes estar en armonía con la cabeza de la Iglesia, nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Él está a la cabeza; ésta es Su Iglesia; y con Su divina guía y con Su inspiración, no fracasaremos"1

En poco tiempo, llegué a amar y a venerar al presidente McKay del mismo modo que había amado y honrado al presidente Smith. De hecho, recuerdo haberle visto en este púlpito, con su resplandeciente y blanca cabellera, y haber pensado que parecía un ángel. 

Los profetas antiguos y los contemporáneos fueron y son gigantes del Señor, escogidos y ordenados antes de venir a esta tierra. Nuestros profetas son hombres a quienes el Señor ha levantado específicamente para presidir la Iglesia durante la época particular de su servicio. El Señor está trabajando a través de los líderes de Su Iglesia hoy en día, como siempre lo ha hecho en el pasado. 

El presidente Wilford Woodruff dijo: "Si tuviéramos todas las revelaciones que Dios ha dado al hombre. . . y las amontonáramos a 30 metros de altura, la Iglesia y el reino de Dios no progresarían, ni en ésta ni en ninguna otra época del mundo, si no contaran con los orác vivientes de Dios"2

Hermanos y hermanas, escuchen las instrucciones y la promesa que se encuentran en Doctrina y Convenios: "Por tanto. . . daréis oído a todas sus palabras y mandamientos que os dará según los reciba, andando delante de mí con toda santidad; porque recibiréis su palabra con toda fe y paciencia como si viniera de mi propia boca" (D. y C. 21:4­5). 

La voluntad del Señor a Abraham no fue suficiente para el pueblo de la época de Moisés y la voluntad del Señor a Moisés no fue suficiente para el pueblo de la época de Isaías. Las distintas dispensaciones requirieron instrucciones diferentes, y lo mismo sucede en nuestros días. En la dispensación en que vivimos se ha combinado el conocimiento de todas las demás dispensaciones del Evangelio. Qué bendición es vivir en esta época en que contamos con la bendición de la plenitud del Evangelio. 

Hoy me gustaría extender una invitación a todos los que estén al alcance de mi voz, de que escuchen la voz del Profeta. ¡Todo miembro de la Iglesia, de toda época y circunstancia, recibirá inspiración y bendiciones si sigue el consejo inspirado de los profetas del Señor! 

Se cuenta la historia de un acontecimiento que ocurrió en Nueva York cuando el presidente David O. McKay regresaba de un viaje a Europa. "Se habían hecho los arreglos para tomarle fotografías, pero el fotógrafo asignado no pudo ir, así que, en su desesperación, la agencia United Press envió al fotógrafo de la sección de homicidios, un hombre acostumbrado a las asignaciones más difíciles de Nueva York. Fue al aeropuerto y se quedó unas dos horas; después salió del cuarto de revelado con un montón de fotografías cuando se suponía que sólo debía tomar dos. Su jefe inmediatamente le reprendió: '¿Para qué estás desperdiciando tu tiempo y tanto material fotográfico?'. El fotógrafo respondió con sequedad que con gusto pagaría los materiales y que incluso podían deducirle del sueldo el tiempo extra que le había tomado. Varias horas después, el vicepresidente lo llamó a su oficina para indagar lo que había sucedido. El fotógrafo dijo: 'Cuando yo era pequeño, mi madre me leía el Antiguo Testamento, y toda la vida me había preguntado qué aspecto tendría un profeta de Dios. Pues bien, hoy encontré uno'"3

¿Tenemos plena conciencia de la maravillosa bendición que es para cada uno de nosotros el haber encontrado a nuestro Profeta? Son numerosas las formas en que hemos sido enriquecidos al escuchar la voz de nuestro Profeta. Tenemos una idea más clara de quiénes somos y de lo que significamos para nuestro Padre Celestial. Vemos el lugar que ocupamos en Su plan. Hemos recibido mandamientos y consejo para guiarnos, recordatorios para mantenernos en el sendero estrecho y angosto y palabras de ánimo para motivarnos cuando nos desanimamos. Si escuchamos las voces del mundo seremos engañados, pero si escuchamos la voz del Señor por medio de Su profeta viviente y seguimos su consejo, nunca nos descarriaremos. 

En un artículo de un periódico reciente se dio encomio al presidente Hinckley; se dijo que ". . .claramente es el hombre del momento. Estrecha manos, da elogios, sabe qué decir y cómo decirlo, y a menudo con sentido del humor"4

Hermanos y hermanas, eso es sólo lo que el público en general ve. Nosotros, como miembros de la Iglesia, vemos mucho más. Por medio de los susurros del Espíritu Santo sabemos que el Señor Jesucristo, que es en realidad la cabeza de esta Iglesia, se comunica con nosotros a través del presidente Hinckley. Yo tuve la bendición y el privilegio de sentir ese espíritu hace un año y medio cuando acudí a la oficina del presidente Hinckley para recibir mi llamamiento a la presidencia general de la Sociedad de Socorro. Antes de conocer el propósito de mi presencia allí, le estreché la mano y recibí un poderoso testimonio personal de que estaba en la presencia de un profeta de Dios. Ese testimonio me inspiró gran humildad y reverencia. Si ese día estaba un poco callada, presidente Hinckley, ese fue el motivo. 

Somos tan bendecidos de tener a un profeta viviente que hace conexiones que nunca antes se han hecho. José Smith hizo esta profecía durante la dedicación del Templo de Kirtland: ". . .para que tu iglesia salga del desierto de las tinieblas, y resplandezca hermosa como la luna, esclarecida como el sol e imponente como un ejército con sus pendones" (D. y C. 109:73). El presidente Hinckley ha sido preparado para nuestra época, para un mundo conocedor de los medios de información. 

En el exterior de las ventanas de nuestra vida hay muchas voces que anuncian el fallecimiento de la honradez, la muerte de la integridad, el acabamiento del bien y de la rectitud, y que incluso anuncian la defunción de la familia tradicional. Cuán bendecidos somos como Santos de los Últimos Días por saber que Dios puede hablarnos hoy a través de nuestro profeta viviente y darnos guía, instrucción y ánimo para seguir adelante, así como sigue adelante la verdadera Iglesia del Señor, firmes y seguros en el sendero que nos lleva de regreso a Su presencia. 

No hay muchas garantías en la vida. No hay un automóvil que tenga una garantía que cubra cualquier eventualidad. Ningún banco en el mundo puede garantizar que nuestro dinero esté completamente seguro. Aún los sellos que afirman que los productos del mercado han pasado inspección, llevan impresa una exención de responsabilidad. Nada que esté hecho o que sea controlado por el hombre se puede garantizar de verdad. Pero he aquí el milagro. El Señor nos ha dado garantías maravillosas sin exenciones de responsabilidad, y ésta es una de ellas: Él escogerá al profeta y nunca permitirá que ese hombre nos desvíe. Imagínense por un momento el impacto de esa promesa. Tenemos por lo menos un recurso al que podemos acudir para recibir guía pura y libre de contaminación. 

Como hermanas en la Sociedad de Socorro, nuestra obra, bajo la dirección del sacerdocio, es ayudar a llevar a las mujeres y a sus familias de regreso a la presencia de nuestro Padre Celestial para vivir con Él de nuevo tal como todos lo hicimos antes de venir a esta tierra. La voz de un profeta viviente, que comunica el mensaje de Dios, es clara, firme, segura y directa. 

El mensaje de Dios nunca fue más claro, firme, seguro y directo que cuando el presidente Gordon B. Hinckley leyó, como parte de su mensaje de la reunión general de la Sociedad de Socorro, efectuada el 23 de septiembre de 1995, "La Proclamación en cuanto a la familia"5. Consideren las lecciones que Dios enseñó a un mundo incierto por medio de esta proclamación: El matrimonio entre el hombre y la mujer es ordenado por Dios. Somos creados a Su imagen. El ser hombre o mujer se determinó antes de venir a la tierra y forma parte de nuestra identidad eterna. Vivimos con Él antes de venir a la tierra. Dios nos mandó tener hijos, pero nos advirtió que los poderes de la procreación sólo deben emplearse dentro de los sagrados lazos del matrimonio. Dios nos dice por medio de Su profeta que el esposo y la esposa tienen la solemne responsabilidad de amarse y cuidarse el uno al otro, de educar a sus hijos con amor y rectitud y de proveer para sus necesidades físicas y espirituales. La familia es ordenada por Dios. Los padres tienen deberes y responsabilidades específicos: el padre debe presidir, proveer y proteger y las madres deben criar a los hijos. Además la proclamación contiene esta advertencia sumamente importante: Los que abusen de su cónyuge o de sus hijos, o que no cumplan con sus responsabilidades familiares, responderán ante Dios. Y además esta advertencia, que la desintegración de la familia traerá sobre el individuo, las comunidades y las naciones las calamidades predichas por los profetas antiguos y modernos. Hermanos y hermanas, en este mismo instante estamos en medio de esa realidad. Todos tenemos el deber de proteger y fortalecer a la familia. 

De nuevo les invito a que escuchen la voz del Profeta. El profeta José Smith estableció la Sociedad de Socorro como resultado de una revelación de Dios, a fin de que ". . .el conocimiento y la inteligencia fluyan desde este momento en adelante". José Smith prometió: "Recibiréis instrucciones por medio del orden del sacerdocio que Dios ha establecido, por medio de los que sean nombrados para dirigir y guiar los asuntos de la Iglesia en esta última dispensación"6.
En la Sociedad de Socorro se nos enseñan las maneras de proteger y fortalecer a la familia. 

El presidente Hinckley ha dicho: "Lo mejor yace adelante. . . Si permanecen en el sendero estrecho y angosto, lo mejor está por delante. Es maravilloso vivir en esta época. Es un tiempo estupendo para ser miembros de esta Iglesia, en el que pueden sostener la cabeza en alto sin avergonzarse y sentir cierto orgullo en esta gran obra de los últimos días"7

Escuchen la voz del Profeta a fin de que conozcan la voluntad de Dios, para que puedan tener Su luz para dirigirles por el sendero. Ruego que también puedan recibir el testimonio personal, como yo lo he recibido, de que nuestro actual Profeta, el presidente Gordon B. Hinckley, tiene instrucciones salvadoras para ustedes y para los suyos; si seguimos esas instrucciones, nos llevarán de regreso al hogar celestial, a salvo y sin mancha del mundo. Digo estas cosas en el sagrado nombre de Jesucristo. Amén. 


NOTAS
1. Classic Stories From the Lives of Our Prophets, pág. 263.
2. "The Keys of the Kingdom", Millenial Star, 51:548.
3. "Memories of a Prophet", Improvement Era, febrero de 1970, pág. 72.
4. Deseret News, 23 de mayo de 1998, pág. A1.
5. Véase Liahona, junio de 1996, pág. 10.
6. History of the Church, 4:607.
7. Graduación del seminario de West High School, 14 de mayo de 1995; citado en el Church News, 2 de septiembre de 1995, pág. 2.

lunes, 14 de marzo de 2011

"Defiende el Bien" - Repaso

Los profetas de los Últimos Días

¿Cuántos de ustedes sienten que tienen la edad suficiente para tomar una decisión importante?

Muestre una lámina del Pte. Spencer W. Kimball.



El presidente Spencer W. Kimball decidió cuando era un niño pequeño nunca romper la Palabra de Sabiduría.
Él dijo: "De vez en cuando algunos respetados oradores dijeron que nunca habían probado cosas prohibidas y luego dije a mi mente: Nunca se debe consumir estas cosas prohibidas que los profetas predicaban en contra. Esa decisión era firme e inalterable. Ahora es el momento de fijar sus metas en la vida. Ahora es el momento de establecer sus normas con firmeza y luego manténgalo a lo largo de su vida." (Amigo, mayo de 1985, p. CFI)

Usted puede tomar decisiones importantes ahora que afectarán a toda la vida.

Muestre una lámina del Pte. Monson.


Esto es lo que nos ha dicho: "Yo doy testimonio de que con Dios todo es posible. Él es nuestro Redentor. Mientras nos esforzamos por aprender sus verdades y vivirlas, nuestras vidas y las vidas de los demás serán bendecidas abundantemente." (Thomas S. Monson, "llegar a ser lo mejor de nosotros mismos", Liahona, abril de 2006, 2-6).

Canten la canción mientras juegan a "Sigan al líder".
Se elige a un niño para hacer de "líder". El líder empieza a hacer movimientos y todos lo siguen imitando los gestos que vaya haciendo.

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domingo, 13 de marzo de 2011

Tiempo para Compartir: Los profetas hablan en nombre del Padre Celestial

Por Diane S. Nichols, Amigos Febrero 2001



“Porque recibiréis su palabra con toda fe y paciencia como si viniera de mi propia boca” D. y C. 21:5

Haz de cuenta que tu madre te pide que les digas a tus hermanos y hermanas que vengan a cenar. Hablas por tu madre, dándole su mensaje a tu familia. ¿Te escucharán?

Nuestro Padre Celestial ha escogido a ciertos hombres para que hablen por Él. A estos hombres se les llama profetas. Ellos nos enseñan lo que Él desea que sepamos. ¿Escucharemos?

Las Escrituras nos hablan de los profetas a quienes nuestro Padre Celestial ha llamado para que hablen en Su nombre. Noé advirtió a las personas que se arrepintieran o una terrible inundación asolaría la tierra. La familia de Noé escuchó y fueron salvados de la inundación (véase Génesis 6–8; 2 Pedro 2:5).

A Lehi se le mostró que Jesucristo sería el Salvador del mundo. Nefi, el hijo de Lehi, oró para saber si las palabras de su padre eran verdaderas. El Señor lo visitó y Nefi creyó todas las palabras de su padre. Más adelante, Nefi, al igual que su padre, habló en nombre del Señor (véase 1 Nefi 1:18–19; 2:16–18).

José Smith fue al bosque a orar. Nuestro Padre Celestial y Jesucristo se le aparecieron y le dieron instrucciones que hicieron posible la restauración delEvangelio (véase José Smith—Historia 1:11–20).

Hoy día tenemos un profeta viviente, Thomas S. Monson. Él es el Presidente de la Iglesia. Fue escogido por Dios y llamado mediante la debida autoridad del sacerdocio. El presidente Monson testifica que Jesucristo es el Hijo de Dios. Todos los profetas testifican de Jesucristo y nos enseñan lo que Él desea que hagamos (véase Jacob 7:11; D. y C. 21:1, 4–5).

Cuando oramos a nuestro Padre Celestial, podemos saber que las palabras del profeta son verdaderas. Cuando oigamos al profeta, sabremos que nos habla ennombre del Salvador y, sí, le escucharemos.


Instrucciones para la actividad:

1. Pega la imagen sobre cartulina gruesa. Recorta las piezas del ornamento giraorio.

2. Haz una figura o pega una foto de ti en el recuadro vacío, y escribe tu nombre debajo.

3. Dobla por las líneas de puntos (véase la ilustración). Lee el pasaje que hay bajo la figura de cada profeta.

4. Haz los agujeros donde se indique y pásales un hilo tal como se muestra en la ilustración. Haz un nudo en el extremo inferior del hilo y un lazo en el extremo superior.

5. Cuelga el ornamento giratorio para recordarte lo que el Salvador les dice a los profetas que te digan.

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miércoles, 9 de marzo de 2011

"Defiende el Bien" - Repaso

Los profetas en el Libro de Mormón

Muestre la lámina de los 2.000 jóvenes guerreros de Helamán.
¿Saben quiénes son las personas en esta imagen? Estos son los 2.000 jóvenes guerreros. Ellos siguieron a Helamán, el profeta. Permítanme que les lea lo que el Libro de Mormón dice acerca de estos 2.000 jóvenes guerreros.


"Y todos ellos eran jóvenes, y sumamente valientes en cuanto a intrepidez, y también en cuanto a vigor y actividad; mas he aquí, esto no era todo; eran hombres que en todo momento se mantenían fieles a cualquier cosa que les fuera confiada.
Sí, eran hombres verídicos y serios, pues se les había enseñado a guardar los mandamientos de Dios y a andar rectamente ante él". Alma 53:20-21

Estos jóvenes fueron fieles en todo momento. Debido a que eran verídicos y serios sus familias fueron bendecidas grandemente. ¿Qué podemos hacer para ser fieles en todo momento? Vamos a cantar nuestra canción Defiende el bien!

Divida a los niños en 3 grupos, y asigne a cada grupo un color de la primaria (rojo, amarillo y azul).

Levante un banderín con el color de cada grupo de forma alternada mientras cantan la canción. El grupo del color del banderín deberá pararse y cantar esa parte de la canción. Puede también levantar más de un banderín a la vez.


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miércoles, 2 de marzo de 2011

Tiempo para Compartir: Los profetas hablan en nombre del Padre Celestial



Juego de Memoria

Arme las tarjetas para el juego de memoria con imágenes de profetas. Tenga en cuenta que necesita 2 imágenes iguales de cada una. Pida a los niños que encuentren las 2 imágenes iguales.

Antes de empezar el juego lean D. y C. 1:38
"Lo que yo, el Señor, he dicho, yo lo he dicho, y no me disculpo; y aunque pasaren los cielos y la tierra, mi palabra no pasará, sino que toda será cumplida, sea por mi propia voz o por la voz de mis siervos, ES LO MISMO."
Agregue al juego 2 tarjetas más, una con "La voz del Señor" y otra con "La voz de mis siervos". Recuérdele a los niños que estas dos tarjetas son iguales.

Las tarjetas de los profetas las pueden descargar de about.com

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¿Querés más ideas?
Entrá en CONEXIÓN SUD!

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