“La
música los puede ayudar a acercarse a su
Padre Celestial; se puede utilizar para educar,
edificar, inspirar y unir”
Thomas S. Monson
Thomas S. Monson
La música de la Primaria debe establecer un ambiente de reverencia, enseñar el Evangelio y ayudar a los niños a sentir la influencia del Espíritu Santo y el gozo que se siente por medio del canto. El propósito de la música en la Primaria es enseñarle a los niños el evangelio de Jesucristo. Las canciones de la Primaria hacen que aprender el Evangelio sea más ameno, además de que invitan al Espíritu y crean un ambiente reverente y de aprendizaje.
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Utilice
música de preludio para fomentar la reverencia e invitar al
Espíritu
La música de preludio genera un ambiente de reverencia y ayuda a los niños a prepararse para aprender el Evangelio. Asegúrese de que se esté tocando música cuando los niños lleguen.
Invite a los niños a participar en la música de preludio y, para ello, pídales que canten conforme los demás entran al aula de la Primaria. Por ejemplo, podría levantar la mano y decir a los niños que cuando abra la mano, deben cantar con voz muy baja, y cuando la cierre, que tarareen la melodía con la boca cerrada.
Durante el preludio, toquen una canción que los niños estén aprendiendo, ya que esto les ayudará a familiarizarse con la melodía. Identifique la canción y luego tararéeles la melodía con la boca cerrada. Entonces pídales que tarareen la melodía con la boca cerrada junto con usted.
La música puede lograr la participación y captar la atención de los niños desde el primer momento en que entran a la Primaria.
Ideas para el preludio
- Hacer
que un niño proporcione el preludio - Invite a un niño
de la Primaria para que toque canciones de la Primaria en el piano o
en un instrumento de viento o de cuerda para el preludio.
- Comenzar
a aprender una canción nueva - Invite a los niños a que
comiencen a aprender la melodía de una canción nueva escuchándola
o tarareándola durante el tiempo del preludio.
- Crear
un ambiente de reverencia - Tenga un preludio musical mientras
los niños entran en el salón de la Primaria.
- Hacer
participar a los niños - Pida a los niños que participen en la
música del preludio pidiéndoles que canten mientras los demás
entran en el salón de la Primaria.
- Tararear la melodía - Pida a niños que escuchen a medida que usted tararea la melodía de una canción que ya hayan aprendido. Invite a los niños tararear la melodía con usted, como parte de la música del preludio.
Consejo práctico: La música puede ayudar a los niños a tranquilizarse y a prepararse para escuchar y aprender. Por ejemplo, usted podría levantar ambas manos por encima de la cabeza y decir a los niños que miren sus manos mientras cantan. Dígales que conforme las vaya bajando, deben cantar con voz cada vez más suave o cantar cada vez más lento. Agradézcales su reverencia.
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Primer
Himno – Utilice la música para invitar a la Reverencia
Durante
los ejercicios de apertura del Tiempo para compartir, los niños
cantan una canción antes de la oración para invitar al espíritu.
“Aquellos
que escogen, dirigen, presentan y acompañan la música pueden
influir más que un discursante con el espíritu de reverencia en
nuestras reuniones”.
—Boyd
K. Packer
Invitar a la reverencia
- Seleccione
la técnica adecuada - Elija
una técnica adecuada para transmitir el mensaje y el espíritu de
la canción. Por ejemplo, las canciones sobre temas sagrados se
deben enseñar con respeto y reverencia.
- Explicar
cómo la música invita al Espíritu - Pida
a los niños que expliquen de qué modo los hace sentir la canción.
Explique que el escuchar buena música nos ayuda a sentir el
Espíritu y mantiene nuestra mente clara.
- Escuchar
y cruzar los brazos - “Escucha mi voz y haz lo que digo…
Ponte el dedo sobre la nariz… la cabeza… la rodilla. Luego
susurra y ‘cruza los brazos’ si escuchas mi voz”.
- Mira
y canta suavemente - “Mira como levanto mis manos en alto.
Ahora, mira cuando bajo mis manos y canto la canción más despacio
y lentamente”. O separe las manos enfrente suyo e invite a los
niños a mirar mientras usted canta. Cuanto más cerca mueva las
manos, más bajito deben cantar.
- Reconocer un comportamiento reverente - La música puede ayudar a los niños a tranquilizarse y a prepararse para escuchar y aprender. A medida que escuchen, miren y sigan las instrucciones, agradézcales por ser reverentes.
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Canción
con Movimiento - Utilice la
música para lograr la participación de los niños y para
proporcionar movimiento adecuado.
El
moverse mientras cantan ayuda a los niños a aprender las canciones
más rápidamente, además de que capta su atención. Asegúrese
de que los movimientos que utilice con las canciones sagradas sean
apropiados. Los movimientos sencillos de manos que representen
palabras o frases clave pueden ser apropiadas para casi cada
canción. Por ejemplo, cuando canten “Siento el amor de mi
Salvador” (CN, págs. 42–43), diga a los niños que se pongan
la mano sobre el corazón cada vez que canten la palabra amor.
Hay
diversas canciones divertidas de movimiento en Canciones para los
niños. Diviértase con ellas, y los niños también se
divertirán. Por ejemplo:
- Cante con los niños “Cabeza, cara, hombros, pies” (CN, pág. 129) a la velocidad normal, y luego desafíelos a que la canten a la misma velocidad que usted conforme usted la canta cada vez más rápido.
- Canten “Espero ser llamado a una misión” (CN, pág. 91). Invite a los niños más pequeños a hacer de cuenta que van montados en un caballo y que llevan un Libro de Mormón a personas que viven en un lugar lejano. (También podrían hacer de cuenta que van volando en un avión o que van sobre un tren que se traquetea mucho).
- Invite
a los niños a pensar en movimientos simples que les ayuden a
recordar las palabras y el mensaje de una canción.
- Invite a los niños a que hagan de cuenta que son misioneros mientras cantan “Llevaremos Su verdad al mundo”. Pídales que marchen en el mismo lugar o alrededor del salón y que sostengan sus Escrituras mientras cantan.
- Haciendo una simple acción (de pie / sentados) cada vez que cantan una palabra específica. "Muestra valor" (pararse y sentarse en "fiel")
- Marchar para una canción como “Sigue al Profeta”.
- “El sabio y el imprudente” - Una variación podría ser sólo cantan las palabras que tiene una acción o cantan todo menos las palabras que tienen acciones.
Consejo práctico: No es necesario que usted sea un músico experto o que tenga una hermosa voz para hacer que cantar sea divertido y significativo en la Primaria.
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Tiempo
de música
Se deben dedicar 20 minutos para la enseñanza de la música durante el Tiempo para compartir, lo cual asegurará de que se cuente con el tiempo suficiente para enseñar las nuevas canciones y que los niños gocen del canto.
Ayude a los niños a entender que no sólo están aprendiendo una canción, sino también un principio del Evangelio (véase CN, pág. iii). Haga preguntas o ayúdeles a concentrarse en el principio que se enseña en la canción por medio de una actividad sencilla, tal como contar cuántas veces cantan una palabra o frase.
Los niños testifican cuando cantan. Recuerde a los niños que se sienten derechos y que cantan con su mejor voz. Halague a los niños y deles las gracias cuando canten bien.
Cómo enseñar una canción
Al planificar cómo enseñar una canción, hágase las siguientes preguntas: ¿Cómo puedo captar la atención de los niños? ¿Qué preguntas puedo hacer que ayuden a los niños a comprender el mensaje del Evangelio que contiene la canción? ¿Qué testimonio puedo dar a los niños que les fortalezca? (Véase CN, pág. 149).
Siempre cante a los niños la letra de una canción nueva; no la lea o la recite solamente, ya que esto ayuda a los niños a hacer una conexión entre la melodía y las palabras. Los niños aprenden una canción cuando la escuchan y la cantan una y otra vez. No es necesario que sepan leer para aprender una canción. Por ejemplo, podría invitar a los niños a que sean su eco. Tóquese el oído y pida a los niños que escuchen una frase corta o una línea mientras usted canta. Luego señálelos cuando les toque a ellos cantarle la línea a usted. Cante dos líneas de esta manera y luego repítalas hasta que los niños se las hayan aprendido. Repita con las siguientes dos líneas (y las siguientes dos, etc.) hasta que se hayan aprendido toda la canción.
Prepárese
Para enseñar el mensaje del Evangelio de una canción estudie los pasajes de las Escrituras en el libro Canciones para los niños. Su propia preparación espiritual y su testimonio son lo que va a invitar al Espíritu para confirmar las doctrinas en los corazones de los niños. A fin de enseñar una canción eficazmente, es necesario que usted se sepa la canción. Practique las canciones en su hogar de manera que cuando las enseñe a los niños pueda verlos a ellos en vez de su libro.
Aprenda usted la canción; familiarícese con la letra y la melodía y, para ello, tóquela en el piano, escuche una cinta grabada o pídale a alguien que la cante o la toque.
Aclare lo que quiere decir la letra. Pregúntese en qué forma podría emplear las referencias de las Escrituras que se encuentren al pie de la canción, ya sea al prepararse para enseñarla o al enseñarla. Busque palabras clave, palabras que rimen, palabras que tal vez los niños no entiendan o que no sepan pronunciar. Fíjese en las partes de la melodía que se repiten y que facilitan el aprendizaje de la canción. Estúdiela una y otra vez hasta que la aprenda bien.
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Mi
plan para enseñar una canción
1.
¿Cómo puedo captar la atención de los niños?
Antes de comenzar a cantar, asegúrese de tener la atención de los niños. Puede captar su atención utilizando ayudas visuales tales como láminas, objetos simples y hasta los mismos niños. Utilice ayudas visuales sencillas. Esto permite que los niños se enfoquen en el mensaje de la canción y permite que el Espíritu testifique que lo que están cantando es verdad. También puede simplemente cambiar el tono de su voz. Las actividades para captar la atención deben ser breves y guiarles directamente a la canción. Por ejemplo:
- Antes
de cantar “Me encanta ver el templo” (CN, pág. 99), pida a los
niños que levanten la mano si han visto un templo. Invíteles a
que mientras canten piensen en cómo se sienten cuando ven un
templo.
- Los niños pueden ser su mejor ayuda visual. Invíteles a utilizar accesorios simples tales como corbatas y Escrituras para representar a misioneros mientras cantan “Llevaremos Su verdad al mundo” (CN, págs. 92–93).
Consejo práctico para canciones nuevas: Cuando presente a los niños una canción nueva, cántela usted primero. Los niños aprenden mejor una canción cuando la escuchan algunas veces antes de empezar a cantarla.2. ¿Qué preguntas puedo hacer que ayuden a los niños a comprender el mensaje del Evangelio que contiene la canción?
Formule preguntas para que participen los niños. Las preguntas ayudan a que los niños se concentren y escuchen aumentando la comprensión de los principios del Evangelio (véase CN, pág. 149). Recuerde hacer las preguntas de modo que los niños puedan descifrar las respuestas a medida que canten la canción.
El pedirle a los niños que escuchen la respuesta a una pregunta les ayuda a aprenderse las palabras y el mensaje de la canción. También podría pedirles que escuchen las respuestas a preguntas tales como “¿quién?” “¿qué?” “¿dónde?” “¿cuándo?” o “¿por qué?” También puede pedirle a los niños que escuchen palabras claves o rimas, o que cuenten con los dedos cuántas veces cantan una palabra específica.
Invítelos a cantar las frases que den respuesta a las preguntas. Varíe el ritmo y la suavidad de la voz para dar énfasis al significado de la letra. Pídales que se escuchen cantar sin acompañamiento; indíqueles que se sienten derechos y que le observen con atención.
- Cuando enseñe “Si escucho con el corazón”, escriba una de las siguientes preguntas en la pizarra: “¿Dónde puedo escuchar la voz del Salvador?” “¿Quién nos enseña a vivir en rectitud?” “¿Quién nos habla con suave voz?” Invite a los niños a que escuchen las respuestas a medida que cantan y que indiquen (cruzando los brazos, poniéndose de pie o tocándose las orejas) cuando canten la respuesta. Pida a los niños que canten juntos la respuesta varias veces. Escriba otra pregunta en la pizarra y repita la actividad.
Consejo práctico: A fin de ayudar a que los niños aprendan la melodía de una canción, “mantenga la mano en posición horizontal y, a medida que canten las palabras, muévala hacia arriba para indicar los tonos más altos y hacia abajo para indicar los tonos más bajos” (LE, pág. 201).3. ¿Qué testimonio puedo dar a los niños que les fortalezca?
Dé un breve testimonio a los niños de las verdades del Evangelio que se encuentran en las canciones de la Primaria o lea los testimonios de otras personas que aparecen en las Escrituras.
Ayude a los niños a entender que cantar es una forma en la que pueden dar testimonio y sentir el Espíritu.
Los
niños sentirán su amor y entusiasmo por el Evangelio a medida que
canta con ellos. Cuando comparta su testimonio del Salvador, ellos
también podrán sentir Su amor por ellos.
Consejo práctico: El utilizar la música en forma eficaz invitará al Espíritu. Cuando hayan terminado de cantar una canción, recuerde a los niños que cuando sienten amor y paz, el Espíritu Santo les está ayudando a reconocer la verdad.
Ideas para enseñar una canción
- Enseñar el mensaje del Evangelio - Haga preguntas y comparta respuestas breves acerca del significado de las palabras y frases para ayudar a los niños a comprender el principio del Evangelio encerrado en la canción.
- Agregar movimientos - Invite a los niños a pensar en movimientos que vayan con cada línea de la canción y luego canten y realicen juntos los movimientos.
- Ponerse de pie para las preguntas y sentarse para las respuestas - Pida a los niños que se pongan de pie cuando canten las preguntas de la canción y que se sienten cuando canten las respuestas.
- Repita la actividad de diferentes formas - La repetición ayuda a que los niños aprendan las canciones nuevas. Repita las canciones de diferentes maneras, tales como susurrar, tararear con la boca cerrada, aplaudir el ritmo, variar la velocidad o cantar sentados y de pie.
- Tiras de papel - Escriba palabras o frases de la canción en tiras de papel. Comience poniendo las tiras de papel en orden sobre la pizarra. Cante la canción con los niños. Pida a un niño que quite una tira de papel, y canten nuevamente la canción. Repitan el proceso hasta que se hayan quitado todas las tiras de papel.
- Escuchar las respuestas - Presente cada frase de la canción pidiendo a los niños que pongan atención para encontrar la respuesta a una pregunta mientras usted les canta la frase.
- Divida los niños en grupos - Divida la Primaria en dos grupos y pida a un grupo que cante sólo las dos primeras palabras de cada frase y pida al otro grupo que complete la frase. Intercambie la asignación de los grupos y repita. Se pueden dividir los grupos de muchas maneras: niños y niñas, por los colores de la ropa, el color de ojos, el cumpleaños en la primera o la segunda parte del año, etc.
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Repase
las canciones para que los niños las aprendan y se diviertan
Los
niños aprenden mejor las canciones cuando las escuchan y las cantan
una y otra vez.
La
repetición ayuda a que los niños aprendan canciones nuevas.
Repita las canciones de diferentes maneras, tales como susurrar,
tararear con la boca cerrada, aplaudir al ritmo, variar la velocidad
o cantar sentados y de pie. Dedique más tiempo cantando que hablando
durante el tiempo de música. Cree oportunidades para que los niños
participen. Por ejemplo, invítelos a improvisar acciones, asigne
grupos pequeños para que canten las diferentes secciones, busque
ideas que varíen los estilos para cantar o deles una lámina o un
objeto para que les recuerde las palabras de una canción
Piense en una variedad de formas para repetir las canciones. Utilice una variedad de enfoques para usar todos los sentidos si es posible. El ver, hablar, moverse y hacer, así como el escuchar, ayudará a los niños a entender mejor y recordar las canciones.Los niños aprenden mejor las canciones cuando las escuchan y las cantan una y otra vez. Repase las canciones para reforzar los principios del Evangelio.
Al
enseñar una canción será necesario repetirla a menudo para que
los niños la aprendan. También deberá repasar la canción
durante el año para mantenerla fresca en las mentes de los niños.
Luego de que se enseñe una canción, repásela y cántela de
varias maneras divertidas. Continúe cantando canciones aún
después de la presentación en la reunión sacramental de modo
que los niños las recuerden.
Repase
y cante las canciones en muchas formas divertidas. Por ejemplo:
- Invite
a los niños a que comiencen a aprender la melodía de una
canción nueva escuchándola o tarareándola durante el tiempo
del preludio.
- Para
repasar “El plan de Dios puedo seguir” (CN, págs. 86–87),
haga algunas señales de tránsito. Escriba diferentes palabras de
la canción en cada señal de tránsito. Levante una señal y
explique a los niños que cuando canten la canción no deben
cantar esa palabra. Repita la actividad con las otras señales de
tránsito.
- Haga un cubo de papel o cartón y en cada lado del cubo escriba una forma diferente de cantar (por ejemplo, aplaudir la melodía, hacer movimientos con las manos, cantar suavemente, cantan los niños, cantan las niñas, o tararear la melodía). En otro cubo escriba los nombres de algunas de las canciones de la Primaria que los niños estén aprendiendo. Invite a un niño a tirar el primer cubo para decidir cómo cantarán la canción y a otro niño para que tire el otro cubo y decidir cuál canción cantarán.
- Considere escribir los títulos de las canciones que desea repasar en diferentes objetos (por ejemplo: flores en un florero, peces de papel en una pecera, plumas en un pavo, hojas en un árbol o corazones pegados en las paredes del salón). Pida a los niños que elijan un objeto a la vez y luego canten la canción.
- Cantan las niñas/Cantan los niños - Haga un dibujo de un niño y de una niña y péguelos en palitos de maderas por separado. Al repasar una canción, levante un palito o el otro para indicar quién debe cantar. Esto mantendrá a los niños que participen de forma activa.
- Títeres cantores - Copie y recorte una de las ilustraciones en la pág. 63 del Manual de la guardería, Mirad a vuestros pequeñitos, para que cada niño la coloree. Pegue cada ilustración a una bolsita de papel para hacer títeres. Invite a los niños a cantar con sus títeres.
- Lanzarle
a la cesta - Invite a
uno de los niños a que tire una bolsita de frijoles, porotos o una
pelota de papel a una cesta. Si él o ella aciertan en el primer
intento, pida a los niños que canten la estrofa una vez; si le
lleva dos intentos, la cantan dos veces, y así sucesivamente.
- Al
cantar “Defiende el bien” (CN, pág. 81), considere variar el
ritmo y el volumen de la canción. Considere enseñar términos
musicales tales como ligado (lento y suave) y picado (rápido y
agitado) y permita que los niños canten la canción en ambos
estilos.
- Los
niños también disfrutan de participar con movimientos, tales
como aplaudir el ritmo o hacer movimientos que correspondan con las
palabras. En la canción “El sabio y el imprudente” (CN, pág.
132), los movimientos con las manos ayudarán a los niños a
centrarse en la letra de la canción. También podría utilizar
movimientos al cantar “El valor de Nefi” (CN, págs. 64–65).
Por ejemplo, pídales que pretendan que están sosteniendo un
escudo con un brazo mientras cantan “Iré y haré”, y que
están sosteniendo una espada en alto cuando cantan “lo que manda
el Señor” y que marchen en el lugar al cantar “La vía Él
prepara y obedeceré”. Pida a los niños que creen sus propios
movimientos apropiados para otras canciones (algunos movimientos
podrían no ser apropiados para la presentación en la reunión
sacramental).
- Permita
que los niños participen en escoger las canciones que van a
repasar. Por ejemplo, dé a cada niño un corazón de papel y
pídales que escriban en él su nombre y una de sus canciones
favoritas de la Primaria. Coloque los corazones en un recipiente que
diga “Canciones del corazón”, y pida a los niños que elijan
unas cuantas para que las canten. Diga a los niños de la Primaria
que las canciones de la Primaria pueden ser una fuente de consuelo,
guía e inspiración, y que las podemos cantar casi en cualquier
momento y en cualquier lugar.
- Nombre
de la canción - Nombre de esa canción: Toque tres notas de la
canción y pida a un niño que adivine el nombre de la canción.
Vaya agregando una nota a la vez hasta que la reconozcan
correctamente. Invite al niño que reconoció la canción a que le
ayude a dirigirla.
- Pasar
un objeto - Pasen un objeto de uno a otro y canten hasta que el
pianista deje de tocar; luego el niño que lo tenga en ese momento
tiene que decir la palabra siguiente de la canción.
- Las
niñas cantan, los niños modulan en silencio la letra de la canción
- Pida a las niñas que cante en voz alta y a los varones que las
sigan modulando la letra en silencio; luego haga a la inversa para
la siguiente sección o versículo.
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Utilice
la música para enseñar principios del Evangelio
“Somos
capaces de sentir y aprender rápidamente a través de la música…
algunas cosas espirituales que por otros medios aprenderíamos muy
lentamente”.
—Boyd
K. Packer
Refuerce los principios del Evangelio. Presentar música en el Tiempo para compartir refuerza los principios que enseña la presidencia de la Primaria. “La música es una manera excelente de invitar al Espíritu del Señor durante sus clases. La música nos permite expresar sentimientos que tal vez sea difícil expresar con palabras” (Guía para la enseñanza, 1999, pág. 9).
Algunas de las mejores lecciones que se enseñan en la Primaria se logran a través de la música. “La música puede incrementar su entendimiento de los principios del Evangelio y fortalecer sus testimonios” (LE, Pág. 202). Considere hacer preguntas sobre una canción para ayudar a que los niños comprendan su significado. Por ejemplo, “Haz el bien” (Himnos, N° 155) enseña que no estamos solos al tomar decisiones en la vida, el Espíritu Santo no guiará al tomar decisiones correctas. Dibuje la silueta de tres escudos de HLJ en la pizarra y escriba las siguientes preguntas en ellos: “¿Quién me guiará a hacer lo justo?” “¿Cuándo tendré Su luz brillando sobre mí?” y “¿Qué se me promete si hago lo justo?”. Señale el primer escudo, lean la pregunta juntos y pida a los niños que escuchen mientras usted canta la canción y luego se pongan de pie cuando escuchen la respuesta. Invíteles a cantar la respuesta juntos un par de veces. Esto les ayudará a recordar las palabras junto con la melodía. Repita la actividad con las otras preguntas. Explique las frases o palabras que podrían ser difíciles de entender para los niños. Canten la canción completa y recuérdeles que al cantarla están testificando de que el Espíritu Santo nos ayudará si escuchamos y hacemos lo justo.
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La
Música en la Guardería
“Bajo
la dirección de la presidencia de la Primaria, los líderes de
música y los pianistas de la Primaria tienen la responsabilidad de
Ayudar con la música en las clases de guardería y en otras clases
de la Primaria, según se les solicite.” (Manual
2:
Administración de la Iglesia 11.2.4
)
Los
niños en edad de la guardería están listos y prestos para
aprender sobre el Padre Celestial y Jesucristo, y la música puede
ayudarles a hacerlo. La música invita al Espíritu y puede crear
un ambiente cálido y de amor, haciendo que la clase de la
guardería sea un lugar agradable en donde estar.
No
se preocupe si no tiene talento para cantar. Los niños escucharán
la letra, observarán sus expresiones de la cara y disfrutarán la
melodía en vez de concentrarse en su capacidad para cantar.
Utilice
la música para enseñar los principios del Evangelio y para
invitar al Espíritu. Algunos de los niños quizá traten de
cantar con usted, pero la mayoría probablemente sólo le
observarán mientras canta. El escuchar las canciones les ayuda a
aprenderlas y, aunque no canten, las disfrutan.
“A
la mayoría de los niños les agrada participar en actividades
musicales. Los ritmos musicales atrayentes ayudan a los niños a
recordar... los mensajes de sus palabras. La música puede
incrementar su entendimiento de los principios del Evangelio y
fortalecer sus testimonios” (La enseñanza: el llamamiento más
importante, págs. 201–202).
Prepare
un lugar especial en el aula de la guardería donde se pueden juntar
los niños cerca de usted para el tiempo de la música. Puede ser
sobre una manta o colchoneta en el suelo o con las sillas dispuestas
en círculo. Siéntese o arrodíllese a fin de que usted está en el
nivel de los ojos y cerca de los niños.
Sugerencia: A los niños les encantan las cosas que han visto y escuchado anteriormente. Si utiliza una canción o un verso de movimiento para la actividad de grupo, repítala unas cuantas veces, bajando el volumen de la voz cada vez más. Si la canción o el verso de movimiento es muy largo para los niños de su guardería, utilice sólo parte del mismo.Formas de utilizar la música
La
música puede tener una diversidad de propósitos en la clase de la
guardería. Se puede utilizar para:
- Dar la bienvenida a los niños. Por ejemplo, puede tener músicasuave mientras los niños entran a la guardería.
- Enseñar principios del Evangelio. La mayoría de las lecciones delmanual sugieren canciones que se relacionan con el tema de lalección.
- Ayudar a los niños a prepararse para comenzar una actividad diferente; por ejemplo, para establecer un ambiente de reverencia comopreparación para el tiempo para la lección.
- Dar a los niños la oportunidad de moverse y divertirse.
- Ayudar a que los niños se familiaricen con las canciones que cantarán en la Primaria.
Sugerencia: Considere preparar una caja de recursos para la música que pueda mantener en el aula de la guardería. Podría contener una lista de canciones y versos de movimiento que les gusten a los niños, dibujos sencillos que los niños puedan sostener mientras usted cante, o instrumentos musicales simples.
A fin de enseñar una canción a los niños, cante una línea corta un par de veces y luego invítelos a cantarla con usted. Elógielos por su esfuerzo. Al principio quizá sólo canten una o dos palabras, y los niños más pequeños tal vez no canten nada, pero de todos modos pueden aprender y divertirse al escucharle cantar. Quizá también disfruten de hacer movimientos sencillos que vayan con la canción. Con el tiempo aprenderán la letra y comenzarán a cantarla con usted, especialmente si repite las canciones.
A
fin de enseñar una canción o un verso de movimiento, memorice las
palabras y las acciones con anticipación. Al cantar o recitar las
palabras, acentúe cada palabra y cada acción. Usted puede agregar
acciones sencillas y apropiadas a cualquier canción o verso
para
ayudar a los niños a concentrarse y a fin de mejorar la enseñanza.
(Véase La enseñanza: el llamamiento más importante,
págs. 208–209.)
En
las lecciones del manual de guardería se incluye la letra de varias
canciones. También puede utilizar:
- Canciones para los niños y las grabaciones de audio de las canciones de la Primaria. Las canciones que son sencillas y que tienen frases que se repiten son especialmente apropiadas para los niños en edad de la guardería. Usted puede agregar movimientos sencillos que correspondan a las palabras.
- El sitio Web de música de la Iglesia, www.lds.org/churchmusic. En este sitio puede escuchar la música de las Canciones para los niños y de las canciones del himnario.
- Ayuda del líder de música de la Primaria.
Música: Usted no necesita un piano o un reproductor de CDs (discos compactos) para utilizar música en la clase de la guardería. Los niños se sentirán cómodos si usted simplemente los junta a su alrededor y canta. Familiarícese con la letra de la canción para que pueda mantener contacto visual con los niños.
Considere
hacer una lista de las canciones que los niños estén aprendiendo,
especialmente las canciones que les guste cantar. Cántelas durante
la clase de la guardería cada semana, mientras los niños estén
jugando con los juguetes, antes o después del refrigerio, o
mientras los niños estén esperando a sus padres. Esta es una
buena forma de repasar las lecciones anteriores. Aunque los niños
no canten con usted al principio, están escuchando y aprendiendo.
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Música
de la Primaria en el Hogar
"Nosotros,
que tenemos el evangelio de Jesucristo, tenemos algo que cantar!"
-Janice Kapp Perry.
Anime
a los niños que canten canciones de la Primaria durante las noches
de hogar, el estudio de las Escrituras y otras oportunidades
propicias. Regale a la familia un
CD con música escogida de la Primaria. Pueden ser las canciones que
se están aprendiendo en el año, canciones relacionadas con
principios del evangelio para usar en la noche de hogar, música
reverente para escuchar el domingo antes de ir a la capilla o música
con movimiento para jugar juntos. Invite a las familias a permitir
que la música de la primaria fortalezca a su familia! Canten:
- en el día de reposo
- en la noche de hogar
- durante el estudio de las Escrituras
- en el momento de la oración
- para trabajar y jugar
- cuando viajan juntos
- como canciones de cuna
***
¿Querés más ideas?
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