Tiempo para Compartir: Julio, Semana 1 'El ayunar y orar puede fortalecer mi testimonio'

Introducción:
El primer domingo de cada mes se llama 'Domingo de ayuno y testimonio', ese domingo ayunamos, es decir, nos privamos de alimentos y bebidas por todo un día, también oramos y nos acercamos mas a Nuestro Padre Celestial y Jesucrito.
El dinero que ahorramos de los alimentos y bebidas que no consumimos lo damos como 'Ofrenda de ayuno', este dinero sirve de ayuda a los pobres y necesitados, se compra alimentos, ropa y otros artículos de primera necesidad que sean necesarios para dichas personas.
Los niños no tienen la obligación de ayunar, pero luego del bautismo, los niños deben prepararse para que en un futuro, no muy lejano, puedan ayunar y asi ayudar en la obra de Dios.
Además podemos ayunar para pedir ayuda, ya sea para tomar una desición o resolver un problema.
Al ayunar demostramos a Nuestro Padre Celestial y Jesucristo que los amamos y que confiamos en que ellos nos ayudarán y contestarán nuestras oraciones.
Nuestro Padre Celestial y Jesucrito saben que es difícil ayunar para nosotros; también saben que cuando ayunamos nuestras oraciones son sinceras y que en verdad necesitamos Su ayuda.

Ideas (además de las que ya se hallan en el Bosquejo del Tiempo para Compartir 2012):


#1: Contar el siguiente relato e intercambiar ideas con los niños:



 Lucrecia miró dentro de la bolsa y salió corriendo en dirección al fondo de la casa, donde su amiguito Daniel, un vecino, estaba jugando. La mamá de Lucrecia estaba cuidando al niño porque la mamá de éste estaba enferma.


—¡Mira! —dijo Lucrecia—. ¡Mira lo que me trajo mi papá!


Daniel miró dentro de la bolsa.


• ¿Qué piensan ustedes que hizo Lucrecia?
¿Creen que ella dijo: “No te daré ningún dulce”, o piensan que dijo: “Toma un dulce”?


¿Cómo creen que se sentiría Daniel si ella le dijera: “No te daré ningún dulce”? ¿Cómo creen que se sentiría el papá de Lucrecia si ella dijera eso? ¿Se sentiría él contento?


Y si ella dijera: “Toma un dulce”, ¿estaría contento Daniel? ¿Estaría contento el papá de la niña? ¿Estaría contento nuestro Padre Celestial? ¿Estaría contenta Lucrecia?


Y sucedió que la niña dijo: “Toma un dulce” y, de ese modo, todos estaban contentos.


En el domingo de ayuno ustedes pueden compartir algo tal como lo hizo Lucrecia: pueden ir a la Iglesia sin haber desayunado, y al no comer (mencione las comidas que por lo general los niños coman) podrían ahorrar el dinero de sus padres y, de ese modo, ellos podrían entregar al obispo esa cantidad de dinero para que él ayude a alguien que no tenga nada que comer.


• ¿Creen ustedes que eso hará feliz a los que no tiene alimentos?
• ¿Les haría felices a ustedes?



#2: Invitar a los niños a que dibujen a una persona por la que les gustaría orar.


#3: Hacer las siguientes preguntas a los niños, si les son difíciles ayudarlos dándoles pistas acerca de la respuesta:



• ¿Quiénes deben orar? (Todas las personas que puedan hacerlo.)


• Cuando ayunamos y entregamos dinero al obispo o presidente de rama, ¿cómo se le llama a ese dinero? (Ofrendas de ayuno.)


• ¿Qué hace el obispo con el dinero de las ofrendas de ayuno? (Lo utiliza para ayudar a los pobres y a los necesitados.)


• ¿Cuáles son algunas de las razones por las que ayunamos? (Para sentirnos más cerca de nuestro Padre Celestial; para recibir ayuda de nuestro Padre Celestial; para ayudar a los demás; porque es un mandamiento.)


• ¿De qué manera nos ayuda el ayuno? (Nos permite sentirnos más cerca de nuestro Padre Celestial y Jesucristo.)


• ¿Cuál es el domingo de ayuno? (Por lo general, el primer domingo del mes.)


• ¿Qué le demostramos a nuestro Padre Celestial y a Jesucristo cuando ayunamos? (Que oramos con sinceridad y que tenemos fe en Ellos.)


• ¿Estarían dispuestos a ayunar si ustedes o alguien a quienes ustedes quieren mucho necesitara ayuda?


#4: Sugerir a los niños a que hablen con sus padres respectivos sobre el ayuno y que vean cuándo y por cuánto tiempo ellos podrían ayunar.


#5: Relatar con tus propias palabras el relato que se encuentra en Marcos 9:17–29:


Un día en que Jesucristo se reunió con Sus discípulos, vio una gran multitud alrededor de ellos. Un hombre que salió de entre la multitud fue a arrodillarse a los pies de Jesús y le contó la triste historia de su hijo que había estado enfermo desde hacía años. El padre del muchacho había pedido a los discípulos de Cristo que lo bendijeran, pero ellos no pudieron sanarlo. Con lágrimas en los ojos, aquel padre suplicó a Jesús que sanara a su hijo, pues tenía la convicción de que el joven podía sanar. Entonces Jesús bendijo al muchacho enfermo, le tomó de la mano y le levantó, y el muchacho sanó.


Los discípulos se asombraron, y después que el padre se alejó con el muchacho, los discípulos le preguntaron a Jesús por qué razón ellos no habían podido sanar al muchacho. Él les contestó que para sanar a aquel muchacho era necesario algo más que la oración: también era indispensable ayunar.

Cartel del lema del mes de Julio

[Clic en la imagen para agrandarlo y guardarlo]

Tiempo para Compartir: Junio, Semana 4 'Cuando me visto modestamente respeto mi cuerpo como regalo de Dios'.

Introducción:


Hacer la siguiente pregunta a los niños para despertar el interés sobre el tema de esta semana: '¿Irían a la escuela en pijamas? ó ¿A la playa con piloto y botas de lluvia?'


Explicar que cuando decidimos seguir a Jesucristo, nuestro Padre Celestial nos entregó un cuerpo para poder venir a la Tierra y ser probados. Ese cuerpo es un templo, donde puede morar el Espíritu Santo si cumplo los mandamientos, y como tal, lo debemos cuidar.


La semana pasada aprendimos acerca de La Palabra de Sabiduría, aprendimos que hay ciertos alimentos y bebidas que son malas para nuestro cuerpo y de las cuales debemos evitar. Así como cuidamos nuestro cuerpo por dentro, lo debemos cuidar por fuera, y una de las maneras es la forma de vestirnos. 
La manera en como nos vestimos demuestra lo valioso que es nuestro cuerpo y que somos discípulos de Jesucristo.


Ideas:


#1: Preparar la actividad de la revista 'Amigos' de Febrero de 2007 de las páginas A8-A9. Se puede hacer copias individuales para cada niño, o bien hacer una copia en grande en cartulina para hacerla de manera grupal. A continuación les dejo una copia...

#2: Preparar previamente una copia en grande de 'Mis Normas para el Evangelio'. Mostrarla a los niños y pedirles que busquen entre las normas la que corresponda con el tema de la semana. La norma es la que dice 'Me vestiré modestamente para mostrar respeto por mi Padre Celestial y por mi mismo'.
Preparar cada palabra de la norma en papel/cartulina grande, entregarlas a los niños y que armen la frase en el pizarrón, pasando por turnos.


#3: Invitar a los niños a que nombren diferentes prendas/ropas que cumplan con la modestia y otras que no serían aptas. Entregar hojas y colores para que los niños se dibujen asi mismo vestidos para asistir a la Iglesia un domingo o ir al Templo.

Tiempo para Compartir: Junio, Semana 3 'Obedezco la Palabra de sabiduría cuando como y bebo lo que es bueno y evito lo que es malo'

Introducción:
Colocar sobre una mesa un vaso con agua limpia y otro con agua sucia, preguntar a los niños: '¿Cuál de los vasos beberían? ¿Porqué?'
Explicar que nuestro Padre Celestial desea que cuidemos nuestros cuerpos y que lo mantengamos limpios de cualquier cosa que sea dañina. Para ayudarnos, en la sección 89 de Doctrinas y Convenios, Él nos ha hablado acerca de algunos alimentos que no son buenos para nuestro cuerpo. A esa sección se la conoce como La Palabra de Sabiduría.

Ideas:

#1: Buscar, recortar, dibujar y/o imprimir dibujos de alimentos y bebidas buenas y malas.
A continuación les dejo varios dibujos...

Realizar en una misma hoja, cartón o cartulina una carita feliz y otra triste, es decir, una carita de un lado y la otra del otro lado. 
Recortarlas por el borde de manera que quede como una moneda con su cara y su ceca.
Les dejo un modelo de las caritas...

Para los mas pequeños se puede realizar un titere de mano. Puede ser como el siguiente...

En una mesa colocar todos los dibujos previamente recortados y decirles a los niños que cada uno elija uno o varios.
Por turno, cada niño pasará al frente y mostrará su dibujo, la maestra en su mano tendrá las caritas o el títere. 
Se le debe preguntar a los niños: '¿La/El bebida/alimento que (nombre del niño) está mostrando es algo bueno o malo para nuestro cuerpo?'. 
Con el títere o las caritas ayudar a los niños, si es un alimento/bebida malo, mostrar la carita feliz o hacer que el títere se lo quiere beber/comer, etc.
Hacer de esta actividad algo divertido, entretenido y educativo, recuerden que estamos enseñando principios eternos.

#2: Entregar a cada niño una copia del dibujo de la página A11 de la Revista Amigos Octubre de 2005. A continuación les dejo una copia por si no encuentran la revista o no le tienen...

#3 Escribir en el pizarrón o en una cartulina/hoja o imprimir la siguiente frase...

Entregar a cada niño una hoja o trozo de papel en blanco y pedirles que cada uno escriba una posible respuesta para completar la frase, por ejemplo: 'al comer verduras/frutas', 'al evitar tomar café/té', etc.


#4 Entregar una copia de la página 47 de 'El Manual  de la Guardería' para que lo puedan colorear. A continuación dejo una copia de cada una...

#5 En el pizarrón escribir: de un lado 'Mandamientos' y debajo las escrituras: DyC 89: 7-9 , 12, 14, 16, y del otro lado 'Promesas' y debajo DyC 89: 18-21.
Invitar a los niños a buscar dichas escrituras y completar con los mandamientos y las promesas que hay dentro de tales versículos.
Se puede hacer esta actividad en un cartel, escribiendo lo mismo en una cartulina y aparte los mandamientos y las promesas para que una vez que los niños las descubran puedan pegarlas debajo de la palabra correspondiente.


#6 Imprimir o dibujar la figura de un cuerpo, ya sea de niño o niña y marcar las consecuencias de cada bebida y alimento malo, por ejemplo: para el tabaco marcar los pulmones, para el alcohol marcar el hígado, para el café marcar el cerebro, etc...
Posible figura...